sábado, 5 de septiembre de 2009
Anticuario
Sueño despierto con los pasados presentes en mi futuro, abro los ojos sintiéndote como te sentí en épocas inimaginables y en horas silenciosas, abro cada puerta que encuentro con la finalidad de conservar cada uno de mis pasos enmarañados en madejas de lana de color purpura en la cual cada nudo desatado expande mi caja torácica tras un suspiro estruendoso y una inhalación asfixiante. Cargo con traumas añejos, conocidos y por descubrir de vidas olvidadas tras el peldaño subido o bajado en el ultimo aliento, pero de igual modo cargo con mis zapatillas de correr confeccionadas en recuerdos contracturados y pujantes en las entrañas, de carencias palpadas en la piel y en anhelos próximos a cruzar por el umbral de la desgastada puerta de mi vida. Me enfrento ante el espejo como anticuario atesorando y saboreando el pasado presente de mi futuro
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